Cómo impactará la reforma tributaria al sector inmobiliario

El reemplazo del ITI por el impuesto a la ganancia sobre la venta de una propiedad que no sea primera vivienda podría aumentar los precios.

Junto con los principales lineamientos de la propuesta oficial de reforma tributaria, el ministro de Hacienda de la Nación, Nicolás Dujovne, reveló esta semana los cambios que la Casa Rosada propondrá al Congreso para el sector inmobiliario. Estos son dos: se elimina el Impuesto sobre la Transferencia de Inmuebles (ITI) y se lo reemplaza por un gravamen a la ganancia de capital sobre la venta de propiedades no destinados a casa-habitación. ¿Qué impacto tienen estas medidas?

Los cambios

Respecto a esta última medida, Dujovne se apresuró a aclarar que la nueva ley sólo va a regir para la compra de propiedades futuras; esto es que, la medida corre para la adquisición de inmuebles efectuada a partir de la vigencia de la norma, sin efecto retroactivo. Todo el stock de propiedades que tienen las personas físicas no van a pagar Ganancias, sino el ITI hasta el momento de la extinción.

En tanto, si bien en términos generales tiene una mirada positiva sobre la reforma propuesta, César Litvin, CEO del Estudio Lisicki, Litvin & Asociados, afirmó que «el ITI es un impuesto que no molesta mucho en las transacciones inmobiliarias», mientras que «en cambio, se propone reemplazarlo por otro cuyo cálculo es más complejo -el Impuesto a las Ganancias- donde se grava, no el 1,5 por ciento sino con el 15, el resultado de la utilidad de la operación; esto es, precio de venta menos costo». Además, advirtió que «si el precio de la propiedad no sube demasiado respecto al costo de adquisición se va a pagar poco impuesto, pero en la medida en que haya una distancia entre ellos, la incidencia va a ser mucho mayor y formará parte de la negociación del precio entre las partes».

A diferencia del sector vitivinícola de la zona de cuyo y la industria tecnológica fueguina, la creación de un nuevo gravamen por Ganancias sobre la utilidad de la transacción no parece ser un problema para el presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Alejandro Bennazar: «Con el gran boom del crédito hipotecario, no va a haber tanta diferencia entre compra y venta, por lo que la ganancia va a ser prácticamente minimizada y suplantada por la reducción del ITI», opinó el martillero y agregó: «No creemos que el cobro de ese impuesto nos vaya a generar algún inconveniente y, si eso sucediera, se buscarán distintos mecanismos como el reacomodamiento en el valor de la propiedad a partir de la negociación entre las partes o su incorporación al valor final del inmueble».

Por su parte el presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios, Miguel Astorga señaló que en las transacciones inmobiliarias el impuesto de la transferencia lo paga el vendedor y no el comprador. «Este impuesto se suele incluir en el precio del inmueble, por lo cual se espera que su eliminación repercuta positivamente en el mercado inmobiliario», explicó. En sentido semejante se manifestó desde Reporte Inmobiliario, José Rozados, al considerar que «la eliminación del ITI es muy positiva porque va en pos de abaratar el costo de las transacciones, más allá del valor de los inmuebles». No obstante, planteó algunas inquietudes respecto al tributo para inmuebles adquiridos con fines de renta: «Habrá que ver la letra chica de la ley dado que, si el descuento prevé algún tipo de ajuste por inflación, entonces va a ser una medida admisible porque se evitaría gravar una operatoria que arroje una rentabilidad nominal positiva, pero que resulte negativa en términos reales. Ahora, si se va a cobrar independientemente de los índices de inflación del período, el impacto puede ser muy negativo porque se pierde capital real por la depreciación de la moneda», advirtió. Este debate recién está comenzando y aún falta que se conozcan todas las cartas del maso.

Fuente: La Nación